Todo comenzó a hundirse cuando cayó el primer remolque. Emma Corrin, interpretada como la Princesa Diana en la muy esperada nueva temporada de La Corona, estaba de viaje en el campo con su mejor amiga y una débil conexión a Internet cuando recibió un recordatorio por correo electrónico: En unas dos horas, el primer adelanto de la temporada debutaría. Aunque el montaje sólo muestra tomas de Corrin desde atrás, sin revelar su rostro, marcó el primer metraje oficial de la actriz como Diana en la popular serie de Netflix. Cuando se estrenó el clip, se desató el caos.
«Fue una locura», recuerda Corrin a BAZAAR.com en una videollamada desde Londres. «Y el mundo se volvió loco. El mundo explotó. Mi teléfono se volvió completamente loco. Fue una locura».
Eso era lo que se esperaba de una serie premiada con 73 millones de espectadores en todo el mundo, ahora que finalmente ha traído a una de las mujeres más queridas de toda la historia. La llegada de Diana al programa se produce sólo 23 años después de la trágica muerte de la princesa de la vida real, cuyo funeral fue visto por unos 2.500 millones de personas en la televisión. En 2020, su legado como humanitaria, icono de la moda y celebridad sigue prosperando, probablemente no sólo por lo mucho que era adorada, sino también por la intensa obsesión del público por su vida. Desde que empezó a salir con el Príncipe Carlos, Diana fue el centro de la atención implacable de los medios de comunicación, y al retratarla, Corrin está consiguiendo una pequeña muestra de ello.
«Me estoy superponiendo», dice del fandom, «porque creo que el papel es tal que la gente no la ha soltado todavía». Al igual que Diana, Corrin fue puesta en el centro de atención. A pesar de sus anteriores papeles en la serie británica Grantchester y en Pennyworth, inspirada en Batman, de Epix, era relativamente desconocida; pero este año, gracias a The Crown, ha cubierto casi una docena de revistas y ahora se la considera sin duda una de las estrellas en ascenso de Hollywood. «Hay un paralelismo con estas cosas, con la trayectoria que experimentó en términos de ser catapultada a la fama. Y es muy extraño», dice Corrin.
La actriz fue cautelosa con las expectativas de su tan esperada temporada. «Siento que hay mucha publicidad. Probablemente sólo estaba en mi cabeza, pero siempre desconfío de mucha publicidad, porque me preocupa no estar a la altura». Pero no había necesidad de preocuparse: Los críticos elogiaron la cuarta temporada como la mejor hasta ahora.
Aún así, Corrin, que estaba inmersa en la escena teatral mientras estudiaba en Cambridge, se preparó diligentemente. Devoró libros, biografías y documentales sobre la princesa. Incluso leyó las cartas que Diana escribió a su suegro, el Príncipe Felipe, en las que encontró un espíritu afín. En el espectáculo, Corrin clava con tanta precisión la suave voz de Diana y sus miradas reveladoras que es sorprendente ver lo animada y rápida que es en la vida real. En nuestra llamada de Zoom, ella bromea y emita con sus manos, ocasionalmente doblando su rodilla para apoyar un pie en su sofá mientras escucha y asiente con la cabeza. Ha cambiado la peluca de plumas de Diana y su atuendo de los 80 por una elegante cola de caballo y un suéter lavanda (que le queda bien porque lleva un tono del color púrpura real).
A continuación, Corrin habla de cómo el viaje de Diana con la familia real se desarrolla en La Corona, recreando el romance de Diana y Charles con el coprotagonista Josh O’Connor, y cómo el hecho de ser alimentada con postres la preparó para una gran escena con Camilla Parker Bowles de Emerald Fennell.
¿Cómo era la atmósfera del primer día en el set? Sé que hiciste un montón de investigación y preparación para interpretar a Diana, pero ¿cómo fue cuando finalmente estuviste allí frente a las cámaras con tus compañeros de reparto?
Fue una locura, pero lo gracioso es que fue tan decepcionante, porque yo estaba en Escocia y todo el mundo ya había estado filmando en Escocia allí durante unas dos semanas o algo así. Vine a unirme, era mi primer día. Y era sólo una escena en la que me despertaba por la mañana. Es muy corta, y fue a mitad del día de rodaje. Y todo el mundo tuvo que recordar que era mi primera toma, porque estaban en medio de todo y, obviamente, todo se mueve muy rápido. Y de repente, están a punto de llamar a la acción, y fue como, «Espera, espera, espera. Esta es la primera toma de Emma. Oh, Dios mío». Lo cual es muy gracioso. Fue muy discreta, porque sólo estaba yo en la cama.
Sí. ¿De qué hablaron Josh y tú en sus escenas con Diana y Charles construyendo la relación, y la forma en que se desmorona? ¿Cómo eran esas conversaciones?
Estábamos muy interesados en no despejar el final. Tuvimos que seguir recordándonos a nosotros mismos no reproducir completamente la tragedia de la misma, porque obviamente, todos sabemos cómo termina, tan tristemente. Y también siempre tratamos de no ser unidimensionales con nuestra representación de su relación. Creo que si le preguntas a alguien, la persona promedio probablemente diría, «Oh, estaba condenado a fracasar. Nunca iba a funcionar. Fue un error. No se amaban el uno al otro».
Pero nosotros decíamos, «Seguramente, eso no puede ser verdad». Se casaron, tuvieron dos hijos juntos, y esos dos niños han crecido hasta ser unos tipos estupendos, por lo que sé. Quiero decir, no los conozco. Pero debe haber habido algo ahí. Y era más interesante para nosotros seguir esa línea de que había un amor, pero era un amor que no podían hacer funcionar, lo que es más interesante.
Definitivamente. Y siento que históricamente, la gente ha vilipendiado a Charles y ves este lado poco favorable de él en el espectáculo, pero también hay momentos en los que las acciones de Diana también son desagradables. ¿Hubo momentos así para ti?
Oh, sí, totalmente. Creo que eso es muy importante. Creo que eso es lo que Peter Morgan hace tan bien, es mostrar los lados muy equilibrados de todos. Creo que el mejor ejemplo de eso en esta serie es Thatcher, que es tan intensamente improbable, y su política es simplemente aborrecible. Pero he mostrado esto a muchos de mis amigos y han estado teniendo crisis, porque están como, «¿Por qué estoy simpatizando con esta persona?»
Pero eso es lo que hace Peter. Es porque te olvidas del resto y te concentras en las emociones que están sintiendo y ves muy íntimamente todo lo que están pasando. Pero es bueno, creo. Y particularmente para Josh, porque Charles es tan villano, y eso es algo que puede suceder tan fácilmente. Y realmente lo siento por él.
Creo que la gente olvida que su matrimonio con Diana podría no haber sido bueno. Creo que se cometieron errores en ambos lados, pero Charles amaba a una mujer, básicamente, toda su vida, que es mejor que la mayoría de los hombres, para ser honesto. [Risas]
Así que, sí, quiero decir, él fue infiel, pero fue literalmente con la misma mujer [Camilla] durante toda su vida. Tienes que darle algo. Y creo que a ambos se les puso en una posición muy difícil. Y no creo que ninguno de los dos fuera inocente. Creo que Diana también tenía un papel que desempeñar, pero creo que ambos estaban pasando por mucho.
Hablando de Camilla, me interesaba esa escena que tú y Emerald Fennell filmasteis juntos, en la que eran dos señoras almorzando juntas y te das cuenta de que hay muchas cosas que no sabes de Charles. ¿Qué pasaba por tu mente cuando estabas filmando eso? ¿Y de qué hablaron tú y Esmeralda?
Sí, eso fue muy interesante. Porque eso realmente sucedió. Fueron a almorzar juntos, lo cual es una locura. El director Ben [Benjamin Caron] habló conmigo mucho antes. Ensayamos mucho esa escena. Y no ensayamos mucho para la mayoría de las escenas, pero para ésa sí lo hicimos.
Y tuvimos un ensayo en el que… Ben ya estaba obsesionado con la idea de usar la comida como arma. Hay una escena en Inglourious Basterds, donde esta chica y este general nazi se sientan, y él, creo, había matado a su familia cuando era más joven. Y ella no sabe si él sabe quién es ella. Y él sigue pidiéndole comida que la hace comer, y ella la come porque no quiere darle ninguna razón para, supongo, concentrarse en ella.
Y entonces vimos eso, y luego Ben básicamente compró montones de postres en la sala de ensayo e hizo que Camilla me los hiciera comer. Como siempre, hizo que Esmeralda básicamente siguiera alimentándome y haciéndome preguntas sobre Charles. Y obviamente Diana, su relación con la comida es tan complicada de todos modos, pero eso añadió una capa completamente diferente.
Y también algo que Ben hizo fue llevar a Josh a la habitación y hacernos jugar la escena con Josh sentado allí entre nosotros. Josh fue literalmente llevado allí por esa razón. Llegó y dijo: «Chicos, esto es un engaño total. ¿Qué estoy haciendo?» Creo que esa escena es muy interesante. Tantas dinámicas en juego.
¿Qué crees que pasaba por su mente cuando se está acostumbrando a la familia real?
No lo sé. Creo que para Diana, vino a la familia real pensando que sería una familia, que sería excitante, porque la gente sabría quién era ella tal vez. Sé que se casaba con un príncipe, pero creo que realmente pensó que habría un sistema de apoyo. Y creo que en el tercer episodio, se da cuenta cada vez más de que eso no existe. Y que en realidad, ella se está uniendo a un sistema increíblemente roto, lleno de gente increíblemente rota.
Sí, pensé que era muy desgarrador cuando ella estaba tratando de llegar a la reina y le decían que no estaba disponible.
Ya lo sé. Y sigue siendo el problema de la reina… no puede funcionar como madre. Y eso lo ves con ella y con Charles también. Ella no puede darle la aprobación, el amor maternal que necesita. Y eso es algo que Diana también está buscando y tampoco puede dárselo a ella.
Pero creo que lo interesante es que podemos verla crear este vínculo con el príncipe Felipe. ¿Estaba eso arraigado en la vida real?
Eso es muy cierto. Creo que me enviaron un montón de cartas que se escribieron entre ellos.
Se escribieron muchas cartas, sobre todo cuando Diana se había peleado con el resto de la familia real. Ella y Philip se mantuvieron en contacto. Y creo que te das cuenta al final, aunque quizás lo diga con más vehemencia en nuestra versión. Creo que se muestra bastante firme, pero creo que realmente sintió simpatía por ella como un extraño, porque creo que él también se sintió así.
Diana es obviamente un icono de la moda y los equipos han hecho un gran trabajo recreando algunos de sus looks más icónicos, pero por tu parte, ¿hubo alguno en el que te metiste que te hizo sentir especialmente como si fueras ella?
Me encantaron algunos de sus primeros saltadores. El jersey de oveja que llevaba y el rosa. Esos son tan icónicos de ella. Y eso siempre ayuda mucho. Además, hubo un atuendo más tarde cuando creo que recibimos el cuerpo de Hugh Lindsay de vuelta del incidente de la avalancha, y estoy usando esta chaqueta negra de bombardero de YSL. Yo estaba como, «Si tuviera esto, lo llevaría puesto todo el tiempo.»
Y la forma en que termina la temporada, es sólo un primer plano de la cara de Diana y ves que las tensiones están muy cerca de su fin. Todos sabemos cómo pasa a la historia, pero internamente, ¿a dónde crees que intenta ir a continuación?
Creo que en ese momento, ella sabe que ha terminado. Creo que en el episodio, la has visto tener esa gran pelea con Charles y es la primera vez que él dijo, ya sabes, «No te quiero». Amo a otra persona. Este es su nombre. Y ahora la estás haciendo infeliz». Escuchar eso, no sólo oír a la persona que amas hablar de otra persona, sino también culparte por cómo se siente esa otra persona ahora, no puedo ni siquiera. Y creo que después de esa escena, ella regresa y está a punto de enfermarse, porque obviamente, así es como ha aprendido a lidiar con la emoción. Y no lo hace. Se detiene a sí misma. Y creo que es un momento muy poderoso, porque es como esa cosa en la que las cosas se ponen tan feas que finalmente puedes procesarlas. Y finalmente puedes desprenderte de ello.
Y la ves tener este momento que es como, «No, ya no valen mi sufrimiento, en realidad». Y luego creo que toma la decisión de tomar las cosas en sus propias manos y tratar de hacer lo mejor de las cosas. Y entonces otra vez, ella es rechazada por la reina. Ella es rechazada por Felipe. Y creo que esa mirada final es un rompecorazones como, «Vaya, realmente lo he intentado. Y nunca escucharás, y nunca lo entenderás. Así que ahora tengo que hacer lo mío».
Elizabeth Debicki asumirá el papel después de ti, lo cual, me gustaría que pudiéramos ver más de ti, pero también estoy emocionada de ver lo que hace a continuación. Si hay algún mensaje o consejo que puedas darle sobre el papel, ¿cuál sería?
Supongo que sería, no te preocupes por interpretar a alguien tan icónico o que la gente piense. Esta es tu interpretación. La gente estará interesada en tu versión de ella.
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